En el punto de mira.
Cada vez estamos más influenciados, más coaccionados y más
controlados.
¿Vivimos en un mundo dónde tenemos que estar localizados en
todo momento?
Cada página que consultas se queda fantasmagóricamente
informatizada, creando un perfil sobre ti, lo que te gusta, lo que no, lo que
te interesa, tus aficiones, tus propuestas… para posteriormente ametrallarte
con publicidad, eventos, anuncios…
Curioso, que un ordenador sepa sobre mí cosas que a lo mejor
ni mis allegados conocen, pero, en una vida real yo decido, elijo a quién
contar o no, mis cosas, pero, en una vida virtual no, ya que no recae sobre mí
el poder de decisión, simplemente soy uno de los millones de perfiles que
navegan en la red.
Pero, una ironía; sí, a mi me controlan, si salgo del país,
me mandan el mensajito de cambio de territorio, si navego por alguna web fuera
de tono, me tienen en el punto de mira, y, sin embargo, siguen sin detectar a
personas realmente peligrosas,
peligrosas para nuestra sociedad, sin
prever atentados, ni grandes desgracias, que supuestamente, con tanta
vigilancia se pueden contener.
Vaya con la vigilancia ¿no?
Parece que nos vigilan para nada. Que en parte invaden
nuestra intimidad a través de multitud de aparatos tecnológicos simplemente para
ofrecernos anuncios sin apenas importancia.
Intimidad
Buscamos intimidad dónde ya no la hay, hoy en día todo se
queda recogido, así que ahora más que nunca debemos tener mucho cuidado con lo
que decimos y hacemos, ya que ahora las palabras ya no se las lleva el viento,
sino que se registran en internet.
Una profesora, para demostrar a sus alumnos la facilidad con
la que actualmente se difunden los mensajes y potenciar su conciencia de responsabilidad
del uso de éstas, realizó un experimento.
Una hoja de cuaderno, un muñeco dibujado, Nico, y una frase
“Ayúdame a recorrer el mundo”, la iniciativa de la profesora ha dado la vuelta
al mundo, llegando a casi todos los teléfonos móviles a través de la aplicación
Whatsapp, un mensaje que se ha vuelto viral demostrando así la dificultad de
controlar la información a través de internet.
Amor Virtual
Si la tecnología influye en nuestra vida y en las
comunicaciones entre nosotros, también en las relaciones amorosas.
El amor… si algo tenemos en común, es que todos tenemos
sentimientos… encontrados o no, en mayor o menor medida, pero sentimos. Nos
emocionamos, suspiramos, nos enamoramos.
Pero, ¿Se está perdiendo el romanticismo con esta nueva
tecnológica? ¿Pueden las redes sociales perjudicar las relaciones de pareja?
Antes, te fijabas con detalle en esas pequeñas evidencias
apenas irreconocibles con el fin de descifrar si realmente le gustabas, como,
la forma en la que te miraba, las caricias que te hacía, o las gracias que te
reía. Pero, ahora esas evidencias se simplifican en si me habla le intereso y
sino pues nada.
¿Dónde quedó eso de recorrerse miles de kilómetros para ver
a esa persona que ocupa tus pensamientos?
Además, actualmente, las formas de conocer gente han
cambiado notablemente.
No os preocupéis si aún no habéis encontrado el amor, porque
ahora es más fácil que nunca gracias a aplicaciones como meeting, E Darling y
muchísimas más, que te permiten conocer online a personas cercanas o no a ti,
parecidas o no a ti, todo lo que tú elijas gracias a precisas descripciones, y si no
te gusta, pasas a otra ficha de otro desconocido que creas que es más a fin a
tus objetivos amorosos.
Desechamos personas, sentimientos, emociones ¿Somos
realmente unos insensibles?
No hay comentarios:
Publicar un comentario